miércoles, 4 de abril de 2012

¿Por qué ser feliz cuando puedes ser normal?

El otro día publicaba el periódico un comentario-entrevista con la escritora británica Jeanette Winterson, acerca de su libro de memorias recientemente publicado en castellano.


La vida de esta mujer, con aspectos dramáticos, es muy literaria, y augura que sus memorias serán interesantes. Su madre natural, que la tuvo con 17 años, la entregó en adopción a los pocos días de nacer. Cayó adoptada en una familia de una secta cristiana integrista (evangélicos pentecostales), en cuya casa no había otro libro que la Biblia. Su madre adoptiva le advirtió que "el problema con un libro es que nunca sabes qué contiene hasta que es demasiado tarde". Desde su adolescencia no ocultó su lesbianismo, lo que finalmente le costó ser expulsada de su casa. La escritora rememora el siguiente diálogo mantenido con su madre cuando ella tenía 16 años:
"—Jeanette, ¿puedes decirme por qué?
 —Por qué, ¿qué?
 —Sabes muy bien el qué.
 —Cuando estoy con ella soy feliz. Feliz, sin más.
 Asintió. Parecía que comprendía y pensé, de verdad, por un instante, que iba a cambiar de opinión, que hablaríamos, que estaríamos al mismo lado del muro de cristal. Esperé. Al final soltó:
 —¿Por qué ser feliz cuando puedes ser normal?”.
La escritora ha utilizado esta sentencia de su madre adoptiva como título de su libro de memorias. Creo que su lectura merecerá la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario